2012-10-01

FRONDIELLAS


2012-09-11 Frondiellas (3054) Circo de Piedrafita 
(Huesca)

Aquí estamos ya preparados para la última ascensión en la zona de Piedrafita.
Como los días anteriores el cielo amanece despejado, un poco fresquito a primera hora y sin viento, en suma, unas condiciones apropiadas para ir en busca de otro tresmil.

Garaipenerako 100% aukera
Tenemos en mente subir las cuatros cimas de las Frondiellas, para ello salimos del refugio por el camino del Balaitus por la Brecha de Latour.

La Bondidier jarraitzeko jitoa
El sendero se inicia al sur del refugio y rápidamente va tomando altura dejando a nuestras espaldas el embalse de Respumoso.

Respumoso ondoan aterpea
Superados los 2300 metros encontramos el desvío hacia las Frondiellas, perfectamente marcado con jitos y con una flecha metálica. 
Si hubiera alguna duda el final de la Arista de la Bondidier sería el mejor de los jitos.


Desbideratzea
La mañana ha salido radiante, antes de salir el sol las pirámides de Piedrafita se recortan en el horizonte al este.

Piedrafitako piramideak
No volveremos al refugio por eso vamos con la mochila a tope, pero ya es el tercer día y el cuerpo puede con todo.

Eguneko motxila haundia
El sendero es un auténtico lujo, está perfectamente marcado, en los tramos herboso visible en el suelo y en los rocosos marcado con jitos. Nos alegramos de ello pues eso quiere decir que nos guiarán en la búsqueda de la chimenea al final en el acceso a la cresta.

La Bondidier azpitik
Se van alternando los tramos herboso con los roquedales a medida que ganamos altura, dejando el embalse ya empequeñecido abajo entre las sombras.

Los Musales
El final de la Arista de la Bondidier es la referencia durante este tramo, tenemos que dejarla a la derecha y trepar por su base por ese terreno cada vea más rocoso.

Gure bidearen harria

Bajo la base del final de la arista ya somos capaces de divisar el circo al sur de las Frondiellas y en su parte más occidental la chimenea que nos permitirá el acceso a la cresta superior.

Goiko zirkua eta La Bondidier
La progresión es bastante más cómoda de lo que habíamos previsto, además los jitos del camino nos dan la confianza suficiente para no dudar ni un momento del itinerario.

Eguzkitan
El trayecto continúa fiable, aunque las piedras, de tamaño cada vez más grande, se van adueñando de la zona.

La Bondidier azpitik 
Se va haciendo un poco penosa esta parte, parece que llegamos al tramo superior del circo pero se resiste, lo bueno es que está todo bien jitado y el camino es más que evidente.

Non dago Willie?
Sin prisa  y con algunas pausas para tomar aliento vamos dejando también abajo la arista de La Bondidier. De repente desaparecen los jitos que tan bien nos iban  guiando. Nos vamos situando bajo la evidente chimenea pero nos parece un poco raro que no esté jitado ese tramo.

La Bondidier goitik
De todas formas no hay otra vía apreciable para superar las paredes bajo la cresta, así que continuamos en busca de la entrada a la chimenea.

                     Cambalés                    Vignemale
                                                        Gran Facha
Sin ninguna indicación más en el camino llegamos a la puerta de entrada a la chimenea, se ve factible, no se aprecia ningún paso raro, salvo lo descompuesto del terreno e iniciamos la trepada.

Tximiniaren sarreran
Se avanza fácilmente, hay mucha piedra suelta por lo que reforzamos la atención, avanzamos juntos para evitar el riesgo en caso de caída de piedras, contemplando las miniaturas a que han quedado reducidas las antes impresionantes torres de la Bondidier.

Erreza oso
En un corto tramo es necesario utilizar las manos pero siempre dentro de la chimenea y sin ningún grado de exposición. 

Eskuak erabili behar
Finalmente la chimenea se abre bajo la cima central, es un terreno terroso de lo que está formada la zona de la cresta a a salida de la chimenea.
El Balaitus nos recibe al otro lado de la vertiente.

Bizkarrean, Balaitus ondoan
Dejaremos las mochilas en este collado, para por la derecha ir en busca de las cimas principal y oriental.

Bizkarrean, Telera atzekaldean
La primera que encontramos es la cima principal de la Frondiella (3058 m) de aspecto completamente diferente al del collado. unos enormes bloques de granito forma la culminación del macizo.

Frondiella 3058 metro
Sin mochila que portar se va disfrutando entre estos bloques que por momentos se interponen en el camino y  hay que treparlos para poder avanzar.

Tontorrean
Un poco más al este está la cima oriental, se ve muy cerca pero en cambio se tarda más en llegar a ella pues la cresta se encabrita y obliga a unas cuantas trepadas y destrepadas.
Al oeste aparecen los Arriel, Midi, Lurien, Pallas, etc.

Ekialdeko tontorrean
Volvemos a por las mochilas, el recorrido está divertido, los bloques de granito dan mucho juego pudiendo escoger itinerarios diversos.

Harri artean jolasten.
De vuelta en el collado recogemos las mochilas y subimos a la cercana cima central, que es la más sencilla de todas, aprovechamos para comer y descansar un rato para prepararnos para ir en busca de la más occidental de todas y primer tresmil empezando por el occidente pirenaico.

Erdiko Frondiella
Las vistas desde la cima nos muestran el recorrido al Balaitus por la vía de la Gran Diagonal. Seguidos y ordenados los ibones de Arriel y más encajonado el Chelau que todavía mantiene la turbidez de las tormentas.
Iniciamos el descenso con estas vistas, tenemos que encontrar el paso que se encuentra la final de la Cresta Wallon, los jitos nos siguen guiando correctamente y entre grandes bloques encontramos el paso hacia la balconada que nos lleva a la base de la cima suroeste. 

Mendebalderantz, Arriel, Midi eta Lurien
Justo donde arranca la Cresta Wallon, a la izquierda, una perfecta balconada discurre bajo los grandes desplomes de bloques de granito que caen de la cresta de la Frondiella.

Mendebaldeko Frondiella
Sin perder casi altura avanzamos entre los enormes bloques de granito desprendidos de la cresta, al inicio se va bien, pero luego se complica un poco más la cosa.

Izugarrizko nahaste
Hasta que llegamos a la base de la montaña, la impresión es que no hay por donde hincarle el diente. Solo se aprecia un  montón de bloques colocados de manera inverosímil. Por suerte encontramos los jitos que nos acercan a la pared, trepamos las primeras repisar y aterrizamos en una chimenea, esta no tiene jitos, pero Berto se atreve a iniciar su ascensión.

Nondik igo??
Mientras lo intenta por la chimenea yo me entretengo en contemplar ese jito colgado en la pared, y preguntarme a ver a quien se le habría ocurrido ir hasta allí a colocarlo, parecía no tener sentido. La chimenea resulta no ser practicable y pensamos en dejarlo. Sin embargo ese jito aéreo nos está diciendo, !!!!es por aquí¡¡¡¡ , pero resulta que el paso parece muy aéreo. Hemos dejado el material de escalada en las mochilas y sin ello no nos atrevemos a ir por allí. 

Nork jarri zuen halako jito hori
La solución fue sencilla, volver a las mochilas y equiparnos para la ocasión.

Orain bai¡¡¡¡¡
Con la tranquilidad que da el llevar material de escalada lo volvemos a intentar.
 Aunque aparenta mucho, al final no es más de un segundo grado, pero la pinta de las rocas que parecen estar en un equilibrio inestable no contribuye a aumentar la confianza.

Zer nolako harrimarka
Berto comenta lo mismo, es sencillo, pero da miedo el estado de las rocas. Llegados a dicho jito se bordea la arista y ya más sencillamente aunque siempre con mucha expectación vamos superando resaltes, chimeneillas y demás obstáculos, siempre manteniéndose  la incertidumbre de que habrá a continuación.

..eta orain zer dagokigu
El resto de la subida discurre ya más relajadamente, los jitos se suceden con regularidad marcando con claridad el camino.

Kontu haundiz
Eso si, las manos hay que ir utilizándolas constantemente y sopesando constantemente la estabilidad de las rocas.

Segi gorantza
El ambiente es excepcional  los ibones de Arriel al fondo son el telón del escenario, bien abajo nos quedan, pronto tendremos que descender a su altura.

Oso ondo seinalaturik
Así terminamos disfrutando de la trepada que nos lleva hasta la cúspide de la cima suroeste de Frondiellas, el primer tresmil del Pirineo empezando por el occidente.

Mendebaldeko tontorra 3004 metro

Descendemos por el mismo sitio, como siempre en la bajada con mayor atención pues los riesgos siempre aumentan.

Beherantz leku beretik
Durante la ascensión contemplamos la instalación de varios cordinos para rapelar, nos acercamos a ellos y pudimos comprobar que su estado era aceptable, así que sin dudarlo empalmamos las dos cuerdas y montamos el rápel.

Rapel egiteko prestaketak
Desde un buen cordino rapelamos la pared que nos deja directamente en la chimenea de inicio de la subida, la pared es lisa y el descenso es muy agradable y seguro.

Garbi ta zuzen
En un instante nos quitamos de encima un peligroso destrepe, y de paso disfrutamos de unos momentos de diversión.

Oso atsegina
De esta forma nos presentamos de nuevo junto a ese jito que parece estar colocado como una motivo de ornamentación y sin embargo es la clave de ascenso de esta vía.

Pallas eta gure jitoa
Terminado el rápel ya no queda más que descender por las repisas de la base pare volver al lugar donde dejamos la mochilas.

Rapela bukatzen
El volver con la cima conseguida, algo que al principio parecía que no iba a suceder, nos alegró sobremanera por lo que subimos al podium para celebrarlo.

Podiumean
Tenemos ahora por delante un descenso de unos 800 metros hasta los ibones de Arriel, prácticamente a nuestros pies pero a miles y miles de piedras de distancia.

Jaitseko unea
Por suerte el descenso está muy bien marcado, incluso al final se puede apreciar el sendero que desemboca justo entre los dos lagos.

Arriel eta Arriel eta Arriel
Junto al ibón inferior retomamos el sendero de Respumoso, por el que vamos uno tiempo, hasta llegar a la bifurcación junto a otro pequeño ibón, donde se separa a la derecha el camino que desciende hasta la presa de Lasarra.

Lakuz laku behera
Seguimos ese sendero marcado con pintura roja, pronto comienza a descender fuertemente en busca del que viene por el valle desde Lasarra.

Añadir leyenda
Antes de encontrarnos con el sendero del valle pasaremos junto a las cascadas de Arriel, no llevan mucha agua, entre la que se llevan a Respumoso y la sequía de este año no lucen mucho en el paisaje.

Arriel goiko urjauzia
Bajo las cascadas entroncamos con el camino de Lasarra a Respumoso, como de costumbre por ahí encontramos a bastante gente, unos en busca de cascadas, otros de lagos y otros muchos como nosotros en busca de no sabemos que.

Lasarrako bidean
Aunque al final sin buscarlo siempre acabamos de la misma forma.

Osasuna¡¡¡¡¡¡¡

Terminamos en Lasarra estos recorridos que nos han llevado por unos cuantos tresmiles del Circo de Piedrafita, hemos dejado otras cimas que por no llegar a esa barrera de los tresmil quedan relegadas a uno plano más segundón pero que merecen mucho la pena y nos han dejado viva la ilusión de volver a esta zona.

Ibilbidea
Después de esto nos vamos para Canarias, queda un techo provincial por ahí pendiente que hay que ir a por él. 
Hasta entonces saludos a tod@s.

9 comentarios:

  1. Preciosa esa ascension con material. Yo me hubiese dado la vuelta y despues me hubiese arrepentido.
    Una pregunta...que tipo de cuerda (longitud y grosor) llevais para este tipo de ascensiones???

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    1. Aupa Juanma:

      Ya te ha respondido Berto sobre el tema. La verdad que es bastante psicológico lo de las cuerdas, porque para subir no las utilizamos para nada, pero solo el llevarlas te da otra sensación. Para bajar si que nos vinieron bien para montar el rápel.
      A ver como rellenan Atxarte.

      Agur. Un saludo.

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  2. Pues sí, Fernan... quedaron pendientes unos "non-tresmiles"... pero impresionantes picos como'l Tebarray y sobretou el Llena Cantal... pa otra será.

    La verdá qu'a posteriori paez que nos lo pasamos bien na Frondiella SW... pero esi pasu púsonos los pelos de punta, jeje.

    Juanma... pues llevábamos dos cuerdas de 30 ms de 7mm que siempre pueden ahorrarte un buen marrón como sería destrepar ese paso.

    No pesan gran cosa y tampoco abultan mucho en la mochila y son mui de agradecer. Hay que sumar, arnés, un par de cordinos por si hay que reponer alguna reunión y un descensor pa gustos (Fernan un ocho que ye más clásicu y yo un reverso, jeje) con mosquetón.

    Lo demás, ya viene en el catálogo de ganes de pasarlo bien o mal, jeje según se mire.

    Un saludu

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    1. Subir hasta aquel jito tuvo su misterio, pero luego si que fue bastante divertido.
      Habrá que ir un día a subir esos otros, pero antes los de Panticosa.

      Un abrazu collaciu.

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  3. Estaba esperando yo esa última foto durante todo el reportaje jaja. Que guapo ye rapelar! Un besu Fernan, nos vemos!

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    1. Para la próxima de Pirineos te toca a ti salir en las fotos, vete preparandote que hay unos buenos tresmiles en Panticosa.
      Nos vemos en el Cantu l'Osu.
      Besinos.

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  4. Muchas gracias Berto Xuan, es lo que pensaba.
    Hasta otra....

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  5. Aupa Fernan.

    Espectacular y aventurera, he disfrutado como un enano con el relato y las fotos.
    Aquí se demuestra que todo material que lleves en la mochila nunca es en vano, en cualquier ocasión te puede salvar de un marrón.

    Un abrazo.

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  6. Aupa Dani:

    Estuvo muy bien la aventura, con sus sorpresas y su tensión mantenida constantemente.
    Seguro que sin las cuerdas no nos hubiéramos atrevido a entrar en la pared pero todo es psicológico.

    Nos vemos. Un abrazo.

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