2018-11-09

TOUBKAL


2018-09-26
TOUBKAL(4167M)
MARRUECOS

Viaje relámpago al Toubkal, tenemos cinco días y los vamos a emplear para ascender al Toubkal y visitar la ciudad de Marrakech, en menos de tres horas de viaje cambiaremos totalmente de civilización y de modo de vivir la vida.
En Marruecos como en España y parte de Europa se produjo la invasión del pueblo árabe, en algunos países se realizó la reconquista, expulsándolos de su territorio,  otros no lo consiguieron y hoy en día permanecen las dos culturas juntas. En Marruecos tenemos a los árabes que ocupan la parte norte del país y el pueblo bereber autóctono que está instalado en la zona interior y más montañosa. 

El sol se pone sobre el Atlántico antes de volar sobre el continente africano, de forma que aterrizamos en Marrakech ya de noche.

Mendebaldea Atlantiko aldetik
 En el aeropuerto nos espera Brahim Bouredda, quien nos ha organizado todo el viaje y a quien no dejaremos de agradecer toda su amabilidad y compromiso.
El nos guiará durante toda nuestra aventura. Tras las presentaciones nos lleva a Imlil, punto de partida hacia el Toubkal, pero es la noche y hay que cenar y dormir en el albergue que regenta en el pueblo. Una cena ligera a base de sopa y tajin, con el té que no falte, antes de ir a dormir.

Brahimen etxean
 A la mañana desayuno con pastas, te y leche y en la puerta el mulo preparado para iniciar el ascenso al refugio de Muflons, sin prisas, no hay que agobiarse que como allí dicen, las prisas matan.  Frente a la puerta del albergue uno de los muchos barrios de Imlil, cada uno con su mezquita.

Atarian mandoa prest
 Tras el desayuno vamos impregnándonos del modus vivendi local, hay que cargar la mula y todo lo necesario para estos dos días en la montaña, hace falta un poco de tiempo para hacer las compras con los productos bien frescos del día. Hay ajetreo en el barrio con la preparación de otras expediciones.
Mohamed nos acompañará los dos días, Brahim se queda en el pueblo arreglando el albergue, que le va a quedar muy bonito después de las obras. 

Gurekin Brahim eta Mohamed
 Con todo lo necesario en la mula comenzamos el itinerario al refugio, dejamos el barrio y por una pista iniciamos el calentamiento que remonta el barranco este de Imlil.
El tiempo está fabuloso, cielo azul radiante y un frescor agradable para caminar.

Madariondoen artean
 Cuando digo todo lo necesario , es todo, hasta la mochila, por lo que el ascenso es un paseo. Subimos con Mohamed que habla español lo suficiente para ir contándonos cosas de su pueblo, su familia y forma de vida.
Una curiosidad es que en los servicios no hay papel higiénico, hay que limpiarse con una manguerita de agua, la mano derecha para abrir el grifo y la izquierda para limpiarse.  

Mohamedekin pistatik hasieran
 A medida que tomamos altura la pista serpentea y va ganando el valle principal de Imlil, al sur, donde asienta otro de los barrios, el denominado Aroumd y hacia donde va la pista-carretera.
Aunque parezca una frivolidad ascender con las manos en los bolsillos, te vas dando cuenta que el subir con mula es ayudar al mantenimiento de estas gentes que ocupan el valle y de su cultura y formas de vida.

Aroumd
 Dejamos atrás Aroumd donde hemos encontrado una cierta actividad, arreglos en casa, el recreo en la escuela y el ir y venir de mulas de otros grupos montañeros. Y comienza la ascensión propiamente dicha.

Mendigoizaleak edo domingueros pisahierbas?
 El río Rheraya, por el que remontaremos, se ensancha en una pedregosa llanura  antes de llegar a Aroumd previamente a precipitarse sobre Imlil. La recorremos hasta el final, donde la senda comienza a ganar altura. 
Y pronto encontramos el primero de los múltiples puestos de venta del camino, de comida, bebida o recuerdos y cerámica popular. 

Lautada Aroumd aurretik
 Dejando el río correr mas abajo del camino y con una pobre vegetación arbustiva con algunos enebros y sabinas prosigue la senda por la que el trasiego es constante. Además de los montañeros hay fieles que asciende a la Piedra Blanca de Sidi Chamarouch, de peregrinaje, para lavar el cuerpo de malos espíritus según nos contó Mohamed.

Ibairen ondotik beti gorantza
 Llevamos más o menos dos horas cuando nos acercamos al punto intermendio más concurrido, se observa gran actividad con los chiringuitos a tope de gente que desciende y se toma un refrigerio.
Parece que no pero la mula corre más que nosotros y hay que esforzarse para no quedar rezagados.

Mandoaeren atzetik
En Sidi Chamarouch hay que cruzar un barranco procedente del valle de la izquierda, en el enclave unos cuantos chiringuitos ofrecen refrescos y comida a los montañeros, así como numerosos productos de artesanía.

Sidi Chamaroucheko txiringitoak
Pero lo más importante es la Piedra Blanca junto a la mezquita a donde acuden los peregrinos a rezar y sanar el espíritu.

Sidi Chamaroucheko Arri Zuria
Junto a Mohamed nos tomamos un descanso en uno de los chirigos para tomar un zumo de naranja recién exprimido, no pidas cerveza que no hay.

Atseden txiki bat bide erdian
A la salida de Sidi Chamarouch se encuentra el tramo más exigente de la subida, la senda en lazadas gana una considerable altura en breve.

Mandoa gogor eutsi
El valle es amplio con el río que corre al fondo con bastante agua procedente del entorno del Toubkal, la senda después del fuerte arreón vuelve a suavizarse y puede subirse de nuevo con la tranquilidad de un paseo.
Mientras, las nubes van desarrollándose por la parte más alta del valle.

Oso eroso bidea ibaiaren gainetik
En suave caminar llegamos al último de los chiringuitos, aquí todos son amigos, para venderte algo claro, la verdad es que por unos pocos euros que les gastes les haces un gran favor.
Hay que observar el sistema de refrigeración de las bebidas de este amigo.

Edariak fresko fresko
Por arriba el tiempo se complica, las nubes han crecido y llueve un poco antes de llegar al refugio, nos ponemos los chubasquero, a la mula también y proseguimos la marcha sin mayores contratiempos.

Euria apur bat
Al de cuatro horas de camino aparece al fondo del valle los edificios del refugio, son dos el de Mouflons y el de la federación francesa.

Aterpearen hurbil
El conjunto parece una fortaleza, alrededor de los edificios una zona llana permite la acampada de las tiendas de campaña de los que van de treking de varios días, que recorren los collados y montañas aledaños.
El lugar está recorrido por el río que desciende entre peñascos y una zona herbosa en la que mana el agua en cantidad.

Mouflons aterpea
Nos registramos en el refugio, o mejor dicho nos instala Mohamed, pues nosotros somos meros clientes suyos y él lo tiene todo controlado.
Tenemos tiempo de sobra antes de la cena así que nos damos una vuelta por los alrededores y de paso estudiar el inicio del camino al Toubkal, pues a la mañana siguiente se sale a las 5 de la madrugada. 

Arratsaldean Toubkalerako bidea arakatzen
A las siete de la tarde Mohamed nos trae la cena. Creíamos que cenaríamos la cena del refugio, pero no, él se encarga de hacerla y traerla a la salón comedor del refugio. Mejor no puede estar, pasta, verduras y pasteles y fruta, y todo con el té por supuesto. Tampoco hay cerveza en el refugio.

Afaria ederra benetan
A las cuatro suena la diana, hay que levantarse. Se ha dormido bien, las habitaciones con literas son semejantes a las de cualquier refugio del Pirineo, con el saco sábana y la manta del refugio suficiente para no pasar frío.
Y el desayuno que nos trae Mohamed, espectacular, como la cena. 
Al monte subiremos los tres (Amadeo, Iñaki y yo) solos, dejamos a Mohamed que duerma hasta la vuelta.

Mohamed, Amadeo, Iñaki eta laurok
La noche está oscura, menos mal que la víspera estudiamos el camino, si no lo más probable es que te pierdas en el inicio. Hay que buscar la cascada situada por encima del refugio y adentrarse en el valle que se abre a la izquierda dejando el río que proviene del sur.

Iluntasunean murgilduta
El cielo está un poco nublado como resultado de la tormenta del día anterior y la luna a duras penas sale algunos momentos para alumbrarnos el camino. Camino algo rocoso al inicio para luego ir mejorando, pero siempre fácil de recorrer.

Ilargia nahi baino ez da agertzen
Al de dos  horas comienza a amanecer apareciendo la silueta del collado Tizi-n-Toubkal, de 3.971 metros. Van apagándose las frontales y disfrutamos de los colores del nuevo día.


Tizi-n-Toubkal, de 3.971 metros.
Desde el collado las vistas hacia el sur son espectaculares, con los colores cambiantes del amanecer.

Hegorantz basamortua
Nos quedaremos un rato en el collado haciendo fotos y contemplando el regalo del amanecer.

Ez dago presarik adizkidea
No hay prisa, amigo.

Gero eta argazki gehiago
Subiendo por la cresta hacia la cima nos sorprende el sol.

Eta bapatean eguzkia
Sol que ilumina al oeste la otra cima del Toubkal, el Ras, Timesguida, etc.

Mendebaldean Toubkal oeste, Ras, eta abar
Estamos por encima de los cuatro mil metros y no hemos sentido ningún síntoma de mal de altura, sólo Amadeo tubo una ligera sensación de pinchazo pero que no fue a más.
La nieve de las últimas tormenta adorna un poco la cima, haciendo el tramo final algo más atractivo.

Amadeo pozik azken metroetan
Sin mayores inconvenientes alcanzamos el trípode de la cima del Toubkal 4167 metros en menos de tres horas desde el refugio.

Toubkal 4167 metro
El amigo polaco nos saluda después de hacernos las consiguientes fotos junto al buzón. Wladcy Pólnocy los caballeros del norte de Gdansk.

ZORIONAK
Los colores cambian a medida que el sol se filtra entre las nubes y alumbra los barrancos que se precipitan hacia el sur.

Koloreen nahasketa
No nos cansamos de buscar la mejor fotografía del momento.


Algunos grupos llevan sus guías para acceder a la cima, la verdad que en esta época sin nieve no se hace necesario la contratación de guías, lo mismo que la de las mulas. Solo la parte solidaria o folclórica lo hacen conveniente, así como para el resto de contrataciones refugio, albergue de Imlil y traslados a Marrakech y aeropuerto. 


No es el momento de preocuparse por la parte técnica, es el momento de disfrutar de la ascensión, las vistas, el descanso en la cima y el compartirla con el resto de grupos que van llegando a ella.


Después de un largo rato en la cima es la hora del descenso, lo haremos por el mismo sitio, no queremos perder mucho tiempo en la bajada pues nos interesa llegar a la tarde a Marrakech para visitar la ciudad.

Leku beretik jaitsiera
Ahora con la luz podemos ver el camino por donde hemos subido, el largo valle que baja desde el collado al refugio directamente, la senda apreciable en todo momento describe lazadas para adaptarse a lo mas cómodo del terreno.

Kolladotik aterpera zuzen zuzen
Los que no quieren madrugar y no les importa perderse el espectáculo del amanecer todavía andan remontando hacia el collado.
Este grupo sube formal formal tras el guía.

Ondo antolatutako talde bat
En uno de los resaltes del camino aparece ya el refugio, se ve tranquilidad en el ambiente, unas cuantas de las tiendas de campaña han sido levantadas, dejando sitio para las que se van acercando de otros recorridos.

Aterpea begibistan
Para las diez de la mañana estamos de vuelta en el refugio, hay pocas mulas y los muleros están todavía descansando. Pero Mohamed ya está levantado, nos prepara un te de bienvenida y quedamos para descender hacia el valle y comer en el camino.

Lasaitasuna aterpeko inguruan
Decidimos bajar cuanto antes pues la tormenta parece que se prepara con más antelación que la de ayer. Repetimos los chiringuitos que están preparándose para el paso de los que bajamos de hacer cumbre.

Mendigoizaleen zain
Un poco antes de llegar a Sidi Chamarouch se pone a llover, la tormenta se desencadena y cae un gran chaparrón.

Euria Sidi Chamarouchen
Aunque nos parece increíble, allí en medio de la tormenta y mientras nos cobijamos en la sala del chiringuito, Mohamed nos prepara la comida, que como siempre está exquisita. Pasta, verduras, fruta y como siempre el té que no falte. No hay cerveza, no.

Euri artean bazkaria
Tras el chaparrón continuamos con el descenso, en el camino nos cruzamos con las mulas que suben hacia el refugio que después de haber pasado la tormenta reanudan el camino.

Añadir leyenda
Y donde empieza la vegetación comienza la vida urbana, Aroumd es el núcleo habitado más alto en este recorrido valle arriba del Toubkal.

Aroumd ibarraren hiri burua
Solo nos queda descender por la carretera-pista que nos devuelve al albergue Lepiney cerca del centro de Imlil. 

Bukatzear Imlilen
En el albergue nos espera Brahim que nos recibe con un té, y dejamos a Mohamed con su hijo que descargue la mula y vaya a descansar que se lo ha merecido sobradamente.

Brahimen etxean
Y aprovechamos la tarde para volver a Marrakech, recorremos la estrecha carretera que desciende de las montañas y que está muy deteriorada a causa de las tormentas de las últimas jornadas. 
Hoy con la luz del día nos vamos percatando de la forma de conducir, de como se vive en estos pueblos, del trasiego constante por las orillas de las carreteras, la actividad de las terrazas de los bares. del importante valor de la industria de la manzana . En fin saboreando algo que dos días antes no pudimos ver durante la noche.

Y haberlas "haylas", pero hay que "encontrailas". Solo en pocos hoteles se pueden encontrar.
Aparte de las cervezas, el simpático camarero que nos atendió tubo la habilidad de ponernos el himno del Atheltic en consideración a la camiseta que yo portaba.

Azkenean garagardoak
Dejamos pasar la tarde plácidamente antes de exponernos a dejarnos engañar por todo tipo de mercaderes que habitan el gran zoco de Marrakech. 

Marrakech
El día siguiente lo dedicamos a recorrer la ciudad, la parte bereber, la Medina, los parques y demás lugares de interés de la ciudad, que no son pocos.


En el gran Zoco no podía faltar la visita a los encantadores de serpientes.


Aunque aquí nada es gratis, hacerse la foto con los bichos tiene también su regateo, si te cogen flojo de reflejos lo puedes pagar.

Sugea oso leuna
Laschen y Brahim Boueredda nos agasajan el último día con una cena que no estaba prevista.

 

Su amabilidad es extraordinaria, no debían de hacerlo pero se empeñan en ello, y para unos comensales como nosotros hasta nos pareció excesiva. Fue una pena no poder hincarle el diente al pollo pero con el resto de la comida nos quedamos más que satisfechos.
No tendremos más que palabras de agradecimiento para ellos por todo el trabajo que se tomaron para que nuestra estancia fuera en todo momento de primera.


La vista desde la ventana del hotel nos muestra una imagen de Marrakech, mezcla de Europa y África. Orden y desorden, olores del dulce al acre, todos los colores y un ajetreo constante por todas partes.

Hoteleko leihotik ikuspegia
A la vuelta disfrutamos desde el avión de las vistas del estrecho con el levante soplando.

14 km de separación de culturas, 14 km de tragedia.

Hain urbil, hain urrun
Si alguien quiere contactar con Brahim aquí tiene su Tfno:212 617061526
Facebook:Brahim Bouredda
Email:boureddab@gmail.com

Unas fotos de Brahim, que anda ahora por esos montes.










Un saludo a tod@s